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CUBLA

Cubla

Pequeño municipio situado a 15 km de Teruel con una población de menos de 100 habitantes.

Gentilicio: Corbato

Está enclavado en las faldas de la Sierra de Javalambre, a 1177 m de altitud.

Coordenadas
40°12’38.39″ N, 1°4’43.25″ W
En decimal
40.210664°, -1.078682°
UTM
4452910 663503 30T

 

TURISMO , PATRIMONIO ARTISTICO  ARQUITECTONICO E HISTORIA

Estamos junto una de las mejores zonas de Europa para observar el firmamento. Una cualidad que le ha merecido la doble certificación como Destino Turístico y Reserva Starlight y el reconocimiento de los astrónomos de todo el mundo.

En esta localidad podemos encontrar construcciones típicas del siglo XVI como la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, declarada bien de interés cultural. También hay presencia de casas señoriales situadas en la Plaza José María Regal. Otras construcciones a destacar son el Lavadero que consta del siglo XIX, la Ermita de la Purísima Concepción, la Ermita de San Cristóbal, la Ermita de Santo Domingo del siglo XV y la Ermita de Nuestra Señora Del Loreto del siglo XVII. Cubla posee un gran patrimonio natural debido a su localización entre montañas como la Piedra Del Picarzuelo, numerosas fuentes, extensos campos de secano dedicados al cereal, pinares y los sabinares del Puerto Escandón. La Estación de Esquí Aramón Javalambre se encuentra en las proximidades de este municipio

El viajero que desde Teruel se dirige a Cubla, Valacloche, Camarena ó Cascante del Río, mucho antes de llegar al pueblo lo primero que avista a lo lejos es la solmene y hermosa torre adjunta a la iglesia. Entre colinas y montículos, sobresale la parte más estilizada de la misma, y sobre ella la veleta de los vientos.
La iglesia es grande, clara, solemne, esplendorosa y bella desde el punto de vista arquitectónico. Está dedicada       a Nuestra Señora de Asunción.
¿Cuando fué construida?.¿A qué estilo arquitectónico pertenece?. ¿Cuánto tardaron en construirla?. ¿Trabajaron muchos operarios?. ¿Cuánto dinero costó?. Preguntas que cualquier persona podría formular. Algunas no podrán contestarse jamás. A otras, por los indicios o huellas, puede darse una respuesta.
Desde el punto de vista de la arquitectura, hay mezclas de estilos y de edades.
En la puerta hay una numeración que pone 1.600, pero su estilo corresponde a un siglo antes. Los pilares que la franquean son netamente del renacimiento, es decir, del siglo XVI. Ahí están las basas, las columnas estriadas, y sobre todo, los capiteles de puro estilo corintio, representan hoas de acanto. La cenefa que corona la puerta, las hornacionas y el triángulo superior están hechos con una maestría perfecta. La techumbre de la puerta también pertenece al renacimiento, con los nervios de crucería que arrancan desde los laterales.
Es posible que se empezara su construcción a finales del siglo XVI, influenciados por el estilo renacentista, y se terminara en el siglo XVII en estilo Barroco.
Penetrando en su interior, observamos que la iglesia tiene una sola nave, que es amplia y espaciosa. En las paredes laterales existen capillas.
La techumbre de su bóveda parece de estilo gótico, es bonita y armoniosa, los nervios que la entrecruzan sirvieron de apoyoa toda la techumbre. No tiene cúpula. La labor de apoyo que realizan los arbotantes en el estilo gótico, está ejercido en la iglesia por una pared de considerable altura, que fortalece los laterales para que sostengan la techumbre.
En la parte ornamental, antes de 1.936, tenía un valioso altar plenamente barroco, de columnas salomónicas retorcidas , y cubierta de hojas de parra y racimos de uva. El plesbítero es solemne. Sería de gran belleza contemplar el conjunto de presbítero y retablo barroco.
La iglesia tenía, además, su gran órgano de fuelle. Aún hay personas en el pueblo que recuerdan haber subido a mover la palanca que movía los fuelles que producían el aire.
Todo esto nos lleva a pensar que en la iglesia se realizarían magníficas funciones religiosas y actos litúrgicos. Al mismo tiempo estaría dotada de clero suficiente para atender dichos oficios religiosos.
Adosada a la iglesia está la torre de grandes proporciones, con cuatro cuerpos de mampostería. Sobre estos cuerpos descansa el campanario hexagonal, terminado por un tejadillo con tejas de distintos colores, unidas fuertemente a las fimbrias interiores. En la cumbre la veleta, para conocer la dirección del viento.
En el lateral izquierdo mirando desde la actual plaza, estaba el cementerio. Fué costumbre durante toda la Edad Media situar los cementerios, primero en el interior de las iglesias, luego se sacaron a sus alrededores como sucedió en Cubla. Posteriormente debió trasladarse, al crecer en número de habitantes y, consecuentemente, en mortandad. Actualmente está situado a no mucha distancia de la iglesia.

El horno era un edificio de una planta, situado en el centro del pueblo. El trabajo que generaba su mantenimiento            era rotativo entre los vecinos. Cada semana estaba encargado un vecino de ponerlo en condiciones, lo que suponía: limpiar interiormente el horno, encenderlo y calentarlo a temperatura adecuada para cocer el pan, introducir mediante unas largas palas el pan para su cocción, retirar el mismo una vez cocido. El encargado del horno procuraba que no faltara la leña. Él mismo había ido al monte y había traído una carga o dos de leña. Como el trabajo era rotativo, todos los vecinos del pueblo pasaban por él.

“SANTO DOMINGO ESTÁ EN UN ALTO,
SAN CRISTÓBAL EN PUNTAL,
LA PURÍSIMA ESTÁ EN LA CUESTA
Y LORETO EN LA CANAL”

Así reza este adagio que indica las cuatro ermitas que, como vigías, custodian el pueblo de Cubla.

Está en parte izquierda bajando por la carretera de Valacloche. El lugar es bonito, recóndito, adornado con unos chopos. Sale un chorro de agua buena para beber (no muy abundante).
Antiguamente, bastantes años ha, iban las señoras de Cubla a por agua a esta fuente. Solo se permitía llenar un cántaro de agua, había que hacer cola. Cuando una llegaba la primera empezaba a llenar el cántaro. Como le costaba bastante, cuando veía venir a otras, sacaba el cántaro a medio llenar y ponía el de reglamento, diríamos, el que podía llenarse todo. De esta forma se llevaba a casa cántaro y medio de agua buena.
El acarreo procesional de agua de la fuente era frecuente, con botijos y cántaros, llevándolos en la cabeza y los lados.

Está situada en una montaña a distancia del pueblo, en dirección este. El lugar es bonito, abrupto, montañoso, verde. En la conjunción de dos enormes rocas que parece que se asoman por curiosidad, a ver lo que pasa en el valle, sale un chorro generos de agua fresca y muy buena.
Los antiguos ciudadanos de Cubla aparejaban sus machos, les ponían una especie de espuertas con tres o seis agujeros, en ésto iban colocados los cántaros, que tras largo rato de andadura, macho y arriero, llegaban a casa con los cántaros llenos de agua del Hocino. En casa tenían grandes tinajas en las que vaciaban el agua del Hocino, de esta forma siempre disponían de agua fresca y buena para beber y cocinar.
Podemos imaginarnos un día cualquiera en la cuesta del Hocino. A primeras horas de la mañana, con escarcha en las ramas y hierbas, o la gotica de humedad que aún tintinea, varios machos o burros se dirigen a la fuente, con los cántaros correspondientes. Vueltas y más vueltas por la senda, hasta llegar a la fuente. El sol asoma cercano al horizonte. El primero que llega, pone sus cántaros a llenar: una vez llenos, los carga y vuelta casa presuroso, tras vaciarlos tiene que ir al campo a trabajar. Primero fué a por agua, en la bajada se encuentra a otros que suben con la misma finalidad. Cambian dos palabras y cada uno sigue su senda: bien de bajada, bien de subida. En la fuente hay varios machos, sus dueños están llenando los cántaros. Mientras el hombre llena, el animal husmea y arranca alguna hierba, que come lentamente. El camino de la fuente del Hocino parece un hormigueo incesante.
El agua es muy necesaria, sin ella no se puede vivir. Las tinajas deben estar siempre llenas, de aquí que el primer trabajo diario sea revisarlas y si están vacías, hay que llenarlas.
Además de los machos se divisa , en ocasiones, a personas individuales que con su cántaro en la cabeza van a la fuente. El marido puede estar enfermo o tuvo que salir con urgencia hacia la capital, o a realizar algún preciso trabajo.
El camino del Hocino lo conocen bien todos, está metido en la sangre de cada uno. Los animales lo saben a ojos cerrados, cuando se le ponen los cántaros, sin decirles nada, van hacia el Hocino.
La fuente del Hocino lo es todo en Cubla.

GASTRONOMÍA

Antiguamente en general para todas las familias. Por las mañanas se comía gachas o sopas de ajos. Al medio día patatas fritas, puré, .. Por la noche se hacía cocido porque los hombres estaban ya en casa. Al cocido se le ponía carne de oveja, morcilla, chorizo y matanza del cerdo en general. Cuando los hombres iban al monte, se llevaban para comer: tortilla, longaniza o costillas. Esto cuando tenían que trabajar mucho. Las familias se autoabastecían. Solo compraban aceite.

GACHAS

Las gachas son “manjar de harina cocida con agua y sal”, según las define el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.
¿Cómo se hacen?. Se pone al fuego un caldero de cobre con agua, cuando ésta hierve, se arroja una cantidad prudencial de harina, en función de la cantidad de gachas que se quera hacer. Se arroja también la sal. Despues de hervir por un tiempo de una hora, más o menos, se quita el caldero del fuego, y con un mango de madera, utilizado exclusivamente para ello, se van moviendo dentro del caldero, con movimiento circular. Si la harina está endurecida, no hay que moverlas mucho para que no resulten secas al comerlas. Si la masa está tierna, hay que moverlas más hasta darle el punto exacto.
¿Cómo se comen?. Una vez preparadas las gachas, se coloca el caldero en medio del comedor, alrededor se colocan los comensales. Las gachas se acompañan con unas buenas raciones de bacalao, tocino con jamón, conejo, sardinas, tomate, pimientos, todo ello frito, ajoaceite, …. Todos los de la casa e invitados tiene su cuchara en la mano y van tomando cucharadas del caldero. Una cucharada de gachas, y otra de bacalao ó conejo, o … No falta una buena bota llena de vino que vaya pasando de mano en mano sin parar. Luego, para postre, fruta y café ó, preferentemente, poleo.

SOPAS VOLTEADAS

Preparación: primero se corta pan seco en pedazos pequeños y se dejan a remojo en un recipiente. Luego se fríen en una sartén varios ajos y unas patatas a tajos finos. Una vez fritos, se arroja el pan, que tiene cierto grado de humedad. Se mecla bien en la sartén mientras se fríe el pan y la patata, cuando ya están lo suficientemente fritos, se voltea la pasta resultante, de aquí le viene el nombre. Se voltea varias veces hasta que ambas caras de esta especie de tortilla, estén doradas.
Una vez preparadas se pone la sartén en el centro de la mesa. Cada comensal con su cuchara y a comer. Pueden acompañarse con bacalao, conejo, setas, … Y la bota que no falte.

MIGAS

Primero se corta el pan fino a trocitos: se fríe en una sartén, en la que se le dá vueltas sin parar. Una vez doradas, ya tenemos las migas preparadas. Se comen como las gachas o las sopas volteadas, acompañadas y con la bota al lado.

ASOCIACIONES CULTURALES

Actualmente hay dos asociaciones activas en el pueblo las cuales se encargan de hacer actividades, eventos, dinamizar, decorar el pueblo, recuperar senderos, patrimonio y tradiciones.